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Los mejores colchones de Látex ¿Cuál debemos comprar?

Bien, vamos a dedicar este artículo a algo tan importante como es el descanso. Y es que lo mejor que puedes hacer para descansar bien es tener un buen colchón de látex. ¿Que por qué un colchón de látex? Muy sencillo, por sus muchas ventajas:

1.- Ventajas

• Poseen una gran resistencia al hundimiento.
• Tienen un tacto suave.
• Son perfectamente adaptables a la forma del cuerpo por su alta elasticidad.
• Gozan de poca firmeza, perfectos para aquellas personas que no admitan colchones duros para su descanso.
• Favorecen la distensión de los músculos y mantiene, por tanto, la masa muscular mejor que otros colchones.
• Son extremadamente cómodos.
• Son muy transpirables e higiénicos.
• Se limpian muy fácilmente.
• Suelen ser más duraderos que otros colchones de otros materiales.
• Al ser fabricados con un material natural, se consideran colchones ecológicos.

Como ves, las ventajas de un colchón de látex son numerosas. Pero, ¿qué es el látex? Pues bien, como decimos, el látex es un material natural que se extrae de la planta Hevea brasiliensis. Entre sus propiedades, se cuenta la de ser uno de los materiales más elásticos que se conocen, por lo que se hace perfecto para la fabricación de colchones, por su adaptabilidad al cuerpo.

Comparativa de colchones de látex

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2.- Características:

Composición de los colchones de látex

Entre los distintos colchones de látex existentes en el mercado, encontraremos de mejor y peor calidad, dependiendo de las comodidades que ofrezcan. Así, tenemos colchones que sólo tienen una zona lumbar diferenciada y colchones que pueden tener hasta siete zonas de descanso independientes, de tal manera que el movimiento de una parte del cuerpo no afecte otras partes, o el descanso de tu compañero/a de sueño no afecte al tuyo.

También podrás encontrar colchones de látex articulados, para personas que necesiten un cuidado hospitalario en casa, por ejemplo. Estos colchones son perfectos para esas personas que necesiten guardar mucho reposo. Además, como hemos dicho, son perfectos para esta tarea, ya que son muy poco firmes (es decir, muy flexibles) y apenas transpiran.

Un colchón de látex moderadamente asequible y bueno, deberá tener mínimo un 80% de látex y un 20% de material sintético, ya que de otra manera te estarán vendiendo un colchón que no es en su mayoría de látex, pero a un precio como si fuera de látex.

Y es que debes saber que hay dos formas de fabricar un colchón de látex:

Elaboración natural: Aquí solamente se usan materiales naturales de la resina de la planta del látex.
Elaboración artificial: Aquí se incluyen materiales sintéticos, como derivados del petróleo.

Por otro lado, para que un colchón de látex cumpla bien su función, te recomiendo que no lo coloques sobre cualquier superficie. Un somier multiláminas de madera es perfecto para sostener tu colchón de látex.

Además, no olvides darle la vuelta una vez al mes aproximadamente para mantener sus condiciones en perfecto estado.

Por otro lado, si te estás planteando comprar un colchón de látex hay algunas cosas que debes tener en cuenta, además de todas la que ya hemos comentado:

1) La Funda

Es muy importante que tu colchón de látex tenga una buena protección higiénica, ya que es un artículo que vas a usar durante muchos años, muchas horas al día. Se recomienda que para garantizar la higienización completa del colchón y sus complementos, se le haga algún tratamiento anti-ácaros, bacterias, hongos…

Por otro lado, hay que buscar materiales con efecto anti-humedad y ligeros, ya que debido a las características de adaptabilidad del colchón, cabe la posibilidad de que te de sensación de calor.
Otra cosa recomendable es usar un modelo desenfundable, pero has de saber que suelen ser tejidos delicados, por lo que cuando se quieran lavar han de ser llevados a la tintorería. Para evitar esto, lo recomendable es que además uses otra funda externa para poder lavarla con comodidad en tu lavadora. Las fundas con cremallera son más asequibles y cómodas de quitar y poner, pero también pueden moverse durante la noche, lo que puede hacer arrugas e incomodar el descanso.

2) El lateral del colchón

El lateral del colchón es una parte muy importante, ya que es la zona principal por donde transpira. Los colchones de látex deben tener como mínimo cuatro aireadores para mantener una buena ventilación e higiene.
Existen los colchones de látex con ventilación perimetral, la cual consigue que el aire circule por el interior del colchón, que será expulsado con los movimientos naturales de la persona mientras duerme.

3) El acolchado

El acolchado de un colchón de látex debe ser flexible, ergonómico y adaptable al cuerpo de la persona. Lo bueno que tiene el látex es que se puede combinar con otros materiales que aportan consistencia al producto, como son las fibras naturales y también sintéticas.

4) El Núcleo

Esto precisamente es lo que diferencia la calidad y el precio de los colchones de látex. Se recomienda que la cantidad mínima de látex debe de ser de 16 cm., pues menos supondría una pérdida importante de consistencia.

Por otro lado, el núcleo de un colchón de látex puede ser natural, sintético o una mezcla de ambos. Obviamente, cuanto más látex contenga más bueno será el colchón, ofreciendo un mayor confort a la persona.

En cuanto a su densidad, se recomienda que el colchón ronde los 75-80kg/m3. Así mismo, un colchón que tenga menos de 60 kg/m3 ya se considera muy baja densidad, por lo que no se hace aconsejable utilizar el colchón de látex.

Por último, no confundir un colchón de látex natural, con uno de viscolátex o viscolásticos. Los colchones de viscolátex están compuestos en su núcleo por látex sintético y luego le añaden una capa de látex e unos 15 cm. aproximadamente. Por lo tanto, no se les puede llamar viscoelásticos, ya que no tienen todas las propiedades de un colchón de látex natural dada su composición mayoritariamente sintética.
No obstante, un colchón de viscolátex suele cumplir muy bien su función para el descanso, ya que no siendo un colchón de látex, también son muy cómodos.

Por tanto, dependiendo el presupuesto del que dispongas, podrás elegir un colchón u otro, pero que no te vendan gato por liebre. Si echas un vistazo por internet, encontrarás que puedes conseguir un colchón de látex desde poco más de 100 euros, hasta pasados los 1000. Esto depende, como todo en esta vida, de la calidad que ofrezca el colchón.

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